
Norman Borlaug es reconocido como el padre de la agricultura moderna por sus investigaciones que iniciaron la Revolución Verde, investigaciones que comenzaron en México en la década de 1940, cuando se preveía una crisis alimentaria debido a la insuficiente producción de cereales como trigo, maíz y arroz.
Por aquel entonces la Secretaría de Agricultura hizo un convenio con la Asociación Rockefeller para realizar investigaciones agrícolas que ayudaran a mitigar la problemática que se avecinaba. Fue así como Norman Borlaug comenzó a trabajar en el Valle del Yaqui, Sonora, con el cultivo del trigo.
Durante años el investigador realizó pruebas con diferentes variedades de trigo, las cuales analizó con todo el detalle posible, para ir mezclando variedades e intentar recuperar cada una de las características más valiosas, lo que requería mucho conocimiento de genética y sobre todo, paciencia.
El resultado fue una variedad de trigo que resistía climas adversos, con baja estatura para evitar el acame, alta productividad y resistencia a plagas y enfermedades, principalmente. También estableció parámetros de siembra y fertilización del cultivo, con lo que logró triplicar la producción. Ganó el premio Nobel de la paz en 1970.